Jang fue ajusticiado el jueves poco después de ser juzgado por un tribunal militar, por haber cometido “crímenes horrorosos como intentar derrocar al Estado mediante todo tipo de intrigas y métodos despreciables, con la salvaje ambición de hacerse con el poder supremo de nuestro partido y nuestro Estado”, señala KCNA, que califica al defenestrado de “escoria humana” y “peor que un perro”. “El acusado Jang juntó a fuerzas indeseables y creó una facción de la cual era jefe”. Pyongyang le acusa también de traicionar la confianza de Kim Jong-un y del padre de este y anterior líder do Corea del Norte, Kim Jong-il, con cuya hermana estaba casado. “El acusado es un traidor a la nación para siempre, que perpetró actos disidentes contra el partido y contrarrevolucionarios”. El Gobierno afirma que Jang confesó durante su juicio que intentó dar un golpe de estado mediante la movilización de sus aliados en el Ejército.
El País